Los venezolanos siguen padeciendo una inflación elevada, pero ¿es la más alta del mundo? Mientras el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) estima que el alza de los precios terminó 2022 en 305,7%; una cifra atribuida a la vicepresidenta Delcy Rodríguez (no confirmada por el Banco Central de Venezuela), señala que la cifra final fue de 234%.
En lo que ambos datos coinciden es que al comparar con otros países de alta inflación, Venezuela se mantiene entre los tres primeros. La posición depende de los números que se tomen. Si nos guiamos por la estimación del OVF, Venezuela tiene la inflación más alta del mundo. Si seguimos el número del gobierno, el país pasaría al segundo lugar (detrás de Zimbabue).
Venezuela ocupó por primera vez el tope con la inflación más alta del mundo en 2010, cuando el resultado fue un alza de precios de 27,2%. En ese año le siguió Guinea Ecuatorial con 20,8% e Irán con 19,8%, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Para 2011 y 2012, el país ya no estuvo en ese «cuadro de honor», pero en 2013 entró para no salir hasta 2016, cuando Sudán del Sur tomó el primer puesto con 479,7%, seguido de Venezuela con 274,4%. En 2017 el país regresó al primer lugar y hasta 2021 seguía allí. Si el BCV confirma la cifra difundida por Rodríguez, quedará en los registros que esa racha terminó, aunque otras estimaciones indiquen lo contrario.
La evolución durante 2022 de la inflación anualizada más alta del mundo muestra cómo varios países se rotaron entre los tres primeros puestos. Estas dos animaciones recrean ese movimiento (una es con el dato de Rodríguez y la otra con el dato del OVF) que en el caso de Venezuela indica que el país llegó a descender hasta el cuarto lugar.
Evolución de los países con mayor inflación anualizada en 2022 (con datos del OVF)
Evolución de los países con mayor inflación anualizada en 2022 (con datos de BCV y Rodríguez)
Se puede apreciar entre los países con la inflación más alta del mundo cómo hay dos grupos bien marcados. Por un lado, Zimbabue, Venezuela y Argentina, cuya inflación anualizada se fue acelerando conforme transcurrió el año (en especial en la segunda mitad); y por el otro Líbano, Turquía y Sudan, que lograron reducirla, incluso este último país cerró con dos dígitos, tras pasar la mayor parte con un alza de precios de tres cifras.